La sucursal del hipermercado Coto con su shopping, ubicada sobre la avenida Hipólito Yrigoyen al 1600, en la localidad de Temperley, fue inaugurada en el año 2000 como parte de un ambicioso proyecto de expansión de la empresa en el conurbano sur. Esta iniciativa empresarial también incluyó a otra sucursal que fue abierta en Lanús y que requirió una inversión de entre 35 y 50 millones de dólares para cada una.
Su llegada a la región causó un impacto positivo y durante más de 15 años supo albergar a cientos de familias que aprovechaban para hacer las compras y luego disfrutar del patio de comidas, los juegos de la clásica Zona Z, el bowling o una entretenida salida de cine.
Sin embargo, en los últimos años el sector del shopping sufrió una decadencia notable no solo en su infraestructura sino también en la pérdida de sus atractivos principales tanto para los adultos como los más chicos y así lo reflejó un video de tiktok publicado la semana pasada que tuvo más de 29 mil reproducciones.
Primero la famosa pista de patinaje sobre hielo pasó a ser una tirolesa para luego un modesto juego de autos eléctricos. Si bien se incorporó un samba como atractivo, el bowling estuvo cerrado durante mucho tiempo por mantenimiento y varias máquinas Arcade dejaron de funcionar.
A medida que el panorama económico decrecía a nivel país repercutía directamente en los locales del Coto de Temperley que no podía solventar los costos de mantenimiento y menos después de una pandemia. Lentamente las persianas empezaron a bajarse y la luminosidad de su pasillo principal a apagarse con menos de 10 comercios abiertos hoy, teniendo una capacidad para 40.
El cierre del bingo-casino influyó notablemente en la disminución del caudal gente, así como también el adiós de la histórica pizzería y del patio de comidas propio de la empresa. Solo quedaran dos cadenas de comidas rápidas reconocidas y un local de venta de platos por peso.
Algunos de los pocos comerciantes que lograron resistir aseguraron en diálogo con El Diario Sur que es “triste” ver al shopping en “estas condiciones” y que por esta razón creen que el lugar resulta “poco atractivo” desde el marketing para instalar un nuevo local. Pese a este panorama, confían en que el cine y el supermercado mantendrán en pie al Coto de Temperley.
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La opinión de los vecinos de la región
El Diario Sur charló con vecinos que frecuentan el shopping desde hace años y expresaron lo siguiente. “Hace varios años que viene decayendo y la pandemia ayudó a que la mayoría de los locales no hayan podido sostener los alquileres. Hoy si subís al shopping y no sé si te encontrás con gente”, contó Gustavo, vecino de Banfield, y recordó: “Cuando abrió explotaba de gente y ahora los que vienen los fines de semana es por el cine o el supermercado. La verdad que no le veo mucha vida”.
Por su parte, Mónica, vecina de Turdera, comentó: “El Coto de Temperley se vino abajo totalmente y el shopping no está bien. Antes venías cualquier día de la semana y estaba siempre lleno”. Y completó refiriéndose a la crisis económica general: “Yo traía mucho a mi hijo y ahora hay poco movimiento porque el país está mal no es un problema solo de Coto”.
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